Diseñar un mail es todo un arte. Se empieza con una página en blanco que debemos llenar con un texto llamativo y, claro, imágenes que vayan acorde al contenido y en algunos casos podemos complementarlo con vídeos o gifs. También debemos tener en cuenta que si abusamos de las imágenes hay más posibilidades de que nuestros mails acaben en la bandeja de spam.
No siempre es fácil elegir qué elementos visuales son los correctos y hay que ser muy conscientes de la audiencia a la que se le envía y qué se quiere transmitir con el mensaje.
Mails en equilibrio
Es recomendable alejarse de diseños complejos ya que cuanta más complejidad, más posibilidades existen de que el mail no se pueda descargar en todos los clientes de correo. Además, debemos tener en cuenta que los mails son herramientas de comunicación cotidiana y debido a la saturación de correos es importante destacarse. Al tener un conocimiento de buenas prácticas del diseño y ponernos al día con las principales tendencias, podemos lograr una construcción de correos más efectiva.
Por eso, preparamos una formación interna en la que exploramos ese sano equilibrio entre palabras y diseño que debemos tener en cuenta. Juan Cortés y Elena Maldonado del equipo de Soluciones serán los encargados de contarnos cuáles son las limitaciones de los mailings y hasta dónde podemos llegar en la propuesta a los clientes.
Juan Cortés
Forma parte del equipo de Soluciones de Prodigioso Volcán
Elena Maldonado
Forma parte del equipo de Soluciones de Prodigioso Volcán.